domingo, agosto 9

Puesta al día

Un día cumplí veintiséis. Al mes siguiente me fui de la casa en que viví siempre y armé una propia; para asumir con las cuentas y con mi independencia, trabajé por cinco meses en algo que no me agradaba ni me hacía bien. Renuncié hace siete días, hace cinco rechacé una oferta de trabajo lejos de todo, y hace tres me di cuenta que debo pensar en cómo llegaré a fin de mes. Hace un mes decidí comenzar a hacer deporte e intento ir tres veces a la semana al gimnasio; pasado mañana comenzaré una dieta. Hace tres días no salgo de la casa de mis papás intentando pensar y organizar mi vida, y hace treinta minutos vi una película. Hace meses busco respuestas, y hace un minuto pensé que esto es la definición de ser (prácticamente) adulto.